En algunas industrias como la del petróleo y el gas, hasta el 85% del coste de un proyecto es responsabilidad de terceros: empresas contratistas que se ocupan de cada aspecto de la tarea, a veces se establecen hasta 70 (setenta) contratos de servicios, algunos de ellos solo para controlar a los otros.
No tener un sistema adecuado para controlar los contratos más importantes va más allá del «manejo descuidado” y entra en la peligrosa región de «en busca de problemas «.
- Además, en proyectos sucesivos, las compañías de O&G generalmente contratan a uno de los mismos 3 o 4 contratistas de servicios principales para realizar tareas similares, sin un historial documentado. Por lo tanto, es aconsejable construir un sistema sólido de gestión de calidad de proveedores para medir, gestionar y supervisar el rendimiento y la calidad de los servicios del contratista a fin de impulsar mejoras de rendimiento continuas en las operaciones y, en consecuencia, optimizar OPEX y CAPEX.
- Los líderes del mercado actual están implementando un Sistema de gestión de la calidad del proveedor (SQM) en sus negocios, que se ha convertido en una fuente de diferenciación de los competidores.
Las ventajas de tener dicho sistema son, entre otras:
1) Detección temprana de desviaciones, para implementar acciones correctivas. Las reuniones periódicas para discutir estos números tienen un fuerte efecto en el rendimiento. Cuando se establece un sistema neutral reconocido de captura de datos, las discusiones sostenidas en estas reuniones pasan rápidamente de debatir diferentes versiones de lo que sucedió para debatir qué se debe hacer para mejorar, ya que las mediciones ya se han establecido.
2) Posibilidad de implementar esquemas de contratos con premios y castigos, no viable si no existieran mediciones de KPI confiables. Tener la capacidad de otorgar un premio al buen actor y una multa al malo, ha demostrado repetidamente un profundo impacto en el rendimiento.
3) La medición continua le permite a la compañía identificar los puntos débiles del contratista. Si algún día algo sale mal, uno tiene una buena idea de las causas y responsabilidades, en lugar de una nube de humo.
4) Cuando llega el momento de adjudicar un contrato, uno sabe que no todos los contratistas son iguales. Si un contratista es mucho mejor pero un poco más costoso, su adjudicación es una decisión difícil de respaldar cuando no hay un registro de desempeño pasado. Y no solo se necesita una justificación interna; En la industria del petróleo, la mayoría de los proyectos son realizados por un operador que representa a 3, 4 o más socios no operativos, que auditarán estas decisiones.
En algunas actividades, como la producción de petróleo, existen softwares que proporcionan las principales compañías de servicios que monitorizan los datos operacionales, pero estos sistemas no se diseñan teniendo en cuenta lo mencionado anteriormente, ni son aplicables a diferentes actividades como perforación, operaciones de planta, adquisición geológica, etc., incluso cuando muchas veces los contratistas brindan servicios en todas estas áreas.
Establecer objetivos para los KPI, capturar datos de rendimiento de SQM, medir, encontrar desviaciones, planificar y gestionar acciones correctivas, es un enfoque ya antiguo y conocido para lograr una mejora continua, pero que aún no se implementa completamente en algunas compañías. Por supuesto, la calidad tiene un coste. Pero la falta de calidad siempre es más cara.
Con la colaboración de José Franco, Ing. Ind., Consultor Senior Upstream en Ideas2Invoices.
Más información en la sección https://ideas2invoices.com/es/oil-gas/
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